Un avión Bombardier CRJ700 de American Airlines con 64 personas a bordo colisionó en el aire con un helicóptero militar Sikorsky H-60, que transportaba a tres tripulantes, mientras se aproximaba al Aeropuerto Nacional Reagan de Washington en Estados Unidos, en la noche del martes.
Las autoridades aún no han confirmado el número de víctimas, pero los informes preliminares de los equipos de rescate sugieren que podría tratarse del accidente aéreo más grave en Estados Unidos en los últimos 15 años. Efectivos de emergencia trabajan en el rescate en el río Potomac, donde se teme que no haya sobrevivientes debido a las bajas temperaturas.
La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que el vuelo 5342 de American Eagle, operado por PSA Airlines y proveniente de Wichita, Kansas, colisionó con el helicóptero militar en su aproximación a la pista 33 del aeropuerto. La FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) han iniciado una investigación para determinar las causas del accidente.
American Airlines emitió un comunicado en el que expresó su pesar por la tragedia y se comprometió a colaborar con las autoridades. Por su parte, el aeropuerto Reagan suspendió todos los despegues y aterrizajes, aunque la terminal permanece operativa.
El espacio aéreo de Washington es uno de los más restringidos y transitados del país, con constantes operaciones de aeronaves comerciales, helicópteros policiales y unidades militares. La combinación de aproximaciones desafiantes y regulaciones estrictas lo convierten en una zona de alto riesgo para la navegación.
Las autoridades continuarán brindando actualizaciones a medida que avance la investigación y se logren esclarecer las circunstancias de este trágico suceso.