
Este lunes Donald Trump asumirá como presidente de los Estados Unidos por segunda vez. La ceremonia, que rompe con varias tradiciones, marcará el inicio de un nuevo período de gobierno para quien fuera también el 45° mandatario del país entre 2017 y 2021. Con su retorno a la Casa Blanca, Trump asumirá como el 47° presidente, prometiendo dar continuidad a su agenda política bajo el lema “Nuestra democracia duradera: una promesa constitucional”.
Por primera vez en cuatro décadas, la ceremonia de asunción se realizará dentro del Capitolio y no en sus escalinatas, como es habitual. Según informaron fuentes de la Casa Blanca, esta decisión responde a dos factores principales: las extremas condiciones climáticas y cuestiones de seguridad. “Los pronósticos para Washington DC, combinados con el factor del viento, podrían llevar las temperaturas a durísimos mínimos récord”, publicó Trump en su plataforma Truth Social. De acuerdo con las previsiones meteorológicas, se espera una temperatura mínima de -12 grados Celsius.
Entre los invitados destacados a la ceremonia se encuentra el presidente argentino Javier Milei, quien compartirá el evento con figuras políticas y diplomáticas de todo el mundo. La transmisión en vivo del acto será organizada en el Capital One Arena, un estadio con capacidad para unas 20.000 personas, para garantizar que el público pueda seguir el evento pese a las restricciones de acceso al Capitolio.
La jornada comenzará temprano para Trump, quien asistirá a una misa en la Iglesia de St. John, siguiendo una tradición presidencial. Más tarde, junto al vicepresidente James David Vance, jurará el cargo bajo un marco solemne. Tras la ceremonia de asunción, el mandatario revisará las tropas y encabezará el tradicional desfile inaugural, aunque con ciertas modificaciones debido al cambio de escenario.
El día cerrará con tres bailes inaugurales donde Trump pronunciará discursos dirigidos a sus seguidores y colaboradores más cercanos. En estos eventos, el mandatario destacará los ejes principales de su nueva administración, enfatizando la importancia de mantener una economía fuerte y reforzar la posición de Estados Unidos en el escenario internacional.
Las festividades relacionadas con la asunción comenzarán el sábado, con una recepción presidencial y una cena de gabinete en Sterling, uno de los clubes de golf de Trump ubicado cerca de Washington. Durante ese día, el cielo de la capital será iluminado por un espectáculo de fuegos artificiales, que marcará el tono festivo de los eventos.
El domingo, en un acto cargado de solemnidad, Trump visitará el Cementerio Nacional de Arlington, donde depositará una corona de flores en la Tumba del Soldado Desconocido. Posteriormente, encabezará un evento multitudinario en el Capital One Arena, que reunirá a miles de seguidores. La jornada culminará con una exclusiva cena a la luz de las velas, destinada a los principales donantes de su campaña y a figuras clave de su equipo de trabajo.
Las actividades ceremoniales continuarán con eventos previstos para los días posteriores. El martes se llevará a cabo el Servicio Nacional de Oración, una ceremonia interreligiosa en la Catedral Nacional de Washington. Este acto representará un momento de reflexión y unidad, en línea con el mensaje de estabilidad y compromiso constitucional que busca transmitir el gobierno entrante.
Con este segundo mandato, Trump enfrentará el desafío de consolidar su legado político en un contexto nacional e internacional que presenta numerosas complejidades. Su capacidad para gestionar estas demandas será clave para definir el impacto de su administración en los próximos cuatro años.