Otra vez el Parador Neptuno: ¿Por qué no se brindan los servicios públicos de baños y duchas en la nueva concesión?

Una vez más la polémica concesión del Parador Neptuno está dando que hablar entre vecinos y turistas en Necochea, con una fuerte molestia por un incumplimiento básico en los términos del servicio.

Sucede que a través de un video difundido en servicios de mensajería instantánea una vecina publicó imágenes quejándose del servicio que se presta en el Parador, más específicamente en la subida de la arena hacia el parador y el cierre inexplicable del sector de duchas y baños públicos del lugar.

"Una pena. El ante año  pasado en los baños públicos había integrantes del Hogar Preciosa Semilla. Lo cual la colaboración era destinada para ellos. Y estaban impecables de limpio y las chicas eran super amables. A  esta playa viene hace más de 30 años las misma personas. Es re lindo ver crecer a la cuidad el parador quedo hermoso. Pero el que no puede pagar 50 mil pesos por día una sombrilla. también necesita el uso de los baños", señaló en su mensaje una vecina que además hizo un recorrido por el lugar con una cámara de video.

Recientemente la apertura del complejo causó profundo malestar en los vecinos por diferentes causas.

En principio, el concesionario redujo notablemente el espacio público, cercando un importante sector de playa para alquilar sombrillas, dejando una pasarela para el uso común en un sector muy angosto en una playa que ya de por sí es angosta. Además, ahora se cobra el estacionamiento en el sector del letrero de Necochea, instalado por el gobierno municipal entre dos concesiones que se adueñaron de la costa rodeando todo ese punto turístico.

Posteriormente el tema llegó al Concejo Deliberante, donde el concesionario intentó cambiar el permiso de uso: se anunció y se tramitó como un balneario pero se inauguró como un centro nocturno con escenario incluído, lo que obligó a la intervención de los ediles. Posteriormente se conoció que hay una denuncia formal elevada ante el gobierno provincial por diferentes incumplimientos en el proyecto, que en r ealidad está demasiado flojo de papeles como para que pudiera haber sido habilitado en primera instancia.

Además de todos esos inconvenientes, en Necochea nadie se explica cómo el concesionario ha podido avanzar teniendo en cuenta que el año pasado masivas denuncias de vecinos y turistas por intoxicarse al consumir el agua del Parador obligaron a la municipalidad a realizar una inspección de Bromatología que encontró contaminación con esterichia coli en el agua que servían a los clientes.

Con todo eso, el futuro de la concesión es incierto por los distintos incumplimientos y la actitud sistemáticamente irregular del concesionario, quien ya es muy mal visto en la comunidad por la desprolijidad permanente de sus iniciativas y el riesgo que ellas han llegado a representar tanto para la comunidad como para el medio ambiente.